Manuela Cabrera
Sauce Pinto es un pueblo que queda en la cercanías de Paraná. Hace alguna décadas se le escapó el futuro cuando un ingeniero de vialidad determinó que la pavimentación
de una ruta que pasaba por ahí tenía que seguir otra traza. Después se dijeron muchas cosas del ingeniero ese y tal vez sean ciertas, pero bueno, capáz que el tipo era un fanático de las curvas y se resistía a creer que la recta es la menor distancia entre dos puntos. Ahora las chicas de Sauce Pinto podrán salir a caminar a la tardecita hasta la ruta por el nuevo acceso pavimentado y quizás aquel ingeniero pueda descansar en paz.
Como en todo pago en Sauce Pinto hay anécdotas sabrosas, como la que ocurrió cuando, en ocasión de celebrarse una Fiesta de la Mujer Campesina, llevaron a Manuela Cabrera, una mujer de 114 años que fue recibida con honores por el gobernador y el vice de la provincia. Cuando le preguntaron qué sentía al ser la única persona viva que había conocido a Urquiza la paisana - trasmitida en directo por la cadena provincial, dijo: “Ah, ni me hable de ese asesino que despellejaba a la gente viva, mejor ni acordarse”.
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