Las vaquitas se fueron pal norte

La tropa se fue pal norte, mirá vos.

Bueno, bueno, parece que empezamos a encontrar las vaquitas que se le perdieron a la mesa de enlace. Los buenos y nobles vacunos no son nada tontos y han huído de la pampa húmeda (húmeda por las fumigaciones de glifosato quiero decir) rumbo al noroeste, donde crecerán al calor de los fogones telúricos. Sin dudas será un mejoramiento sustancial de la genética vacuna nacional que dará como resultado excelsas empanadas salteñas, sublimes costillares y bifecitos al malbec.

Me vino al pelo la data, apenas cobre lo que arreglé con Néstor, invierto en ésto, negocio posta.